Los hemos visto muchas veces por las calles de Linares en celebraciones festivas. Siempre llevan una sonrisa en los labios y levantan el ánimo de todo aquel que se cruza en su camino. Son ocho músicos profesionales de la ciudad que, un día, allá por 2010, decidieron montar una banda callejera.
Su nombre es ‘La tía Loles’ y acaban de regresar de la localidad granadina de Montefrío con el segundo premio del certamen del IV Festival Ventolera, uno de los más prestigiosos del país en música de viento.
Para el común de los mortales, esta formación linarense es una charanga, pero en realidad su arte va mucho más allá de animar las fiestas de los pueblos que los contrata. Por sus venas corre la pasión por la música. Todos han estudiado en el conservatorio y dedican su vida al instrumento que aprendieron.
Javi Estudillo toca el trombón; Sergio Latorre la tuba; Kike Cruz es el saxo soprano; Francisco Romero el saxo alto y Juan Antonio Fuentes el saxo tenor; David escudero la trompeta y la percusión está en manos de Fernando Corrales y Javi Hurtado. En Montefrío estuvieron acompañados por Cristina Escudero y Javier Soler, conocidos artísticamente como Tronchajara y Papelino.
No sabemos si se lo pasaron mejor ellos o el público, pero lo cierto que en el pueblo granadino dejaron huella, rodeados de músicos de la talla de Jorge Pardo, Fetén Fetén o Elsa Bhör, entre una larga e interesante lista. La programación de esta cuarta edición ha estado compuesta por conciertos, talleres, cursos, conferencias y concursos en torno a la temática de los instrumentos de viento y sus músicas.
Tras su exitoso paso por Montefrío, en el que compitieron con 21 ‘charangas’ hasta alcanzar la final, la banda de ‘La tía Loles’ seguirá recorriendo las calles y las plazas de la geografía andaluza o de cualquier otro lugar del mundo. Es temporada alta y la ha cogido con ganas después de dos años de dura pandemia.
