Vivir junto a una macrogranja animal. Es la realidad a la que se enfrentan los vecinos de Bailén y Baños de la Encina, que temen que se construya una explotación industrial para casi de 3.000 cerdas con lechones en el paraje de La Muela, entre ambos municipios.
Estas instalaciones de tipo intensivas generan muchísima contaminación. Va más allá de malos olores y tránsito constante de maquinaria pesada. De construirse, el complejo gastaría miles metros cúbicos de agua y generaría residuos de purines (subproductos derivados de la actividad animal) que podrían contaminar el aire y los acuíferos de la zona.
Además, se teme que la instalación de una granja de estas dimensiones destroce la economía de los pueblos en sectores tan sensibles para Baños de la Encina, por ejemplo, como el turismo cultural y de naturaleza, al margen del daño obvio al olivar.
Todas estas razones han llevado a los vecinos a constituir una plataforma ciudadana para frenar el proyecto. A ella se han sumado los ayuntamientos de las dos localidades, partidos políticos, organizaciones ecologistas, colectivos vecinales y profesionales relacionados con el medio ambiente.
El pasado jueves en el Museo de las Batallas de Bailén se celebró la reunión de constitución de la mencionada plataforma, a la que asistieron los regidores afectados, Luis Mariano Camacho y Antonio las Heras, quienes explicaron el posicionamiento de sus administraciones.
También se informó a los asistentes del «infierno» que supone vivir junto a una macrogranja con ejemplos de otros municipios que ya las sufren. «Este modelo de desarrollo no lo queremos para nosotros ni para ningún pueblo», aclaró Antonio las Heras. El alcalde bañusco anunció que su Ayuntamiento ya ha presentado alegaciones al proyecto, al igual que ha hecho el de Bailén.
Una de las primeras acciones reivindicativas ha sido la recogida de firmas, a las que se unirán cuantas sean necesarias para frenar la implantación de esta explotación ganadera, cuya aprobación definitiva depende, en último caso, de la Junta de Andalucía.