Poco menos de 48 horas ha durado la tregua en los termómetros. Una tregua que, en realidad, no ha sido tal, y que tan solo ha devuelto las temperaturas a valores normales. Un espejismo en forma de descenso de temperaturas que quedaba atrás durante la tarde del jueves.
Desde este viernes y durante todo el fin de semana, la Agencia Estatal de Meteorología tiene activado el aviso naranja por temperaturas máximas que alcanzarán los 43 grados en Linares. Serán tres jornadas de intenso calor que seguirá, al menos, hasta el miércoles de la semana que viene cuando se prevé un descenso del mercurio para situarse en valores más propios del mes de julio.
Noches tórridas
Lo peor no será solo en las horas centrales del día, sino también por la noche en las que los termómetros no bajarán de los 25 grados desde este sábado y hasta el lunes. Esto significa que costará conciliar el sueño y que viviremos episodios de insomnio, cansancio e irritabilidad.
¿Qué hacer para dormir mejor con calor?
Un aspecto fundamental para dormir bien en las noches muy calurosas del verano es ceñirse a los horarios de sueño. Así, evita las siestas y acuéstate a una hora más o menos similar todos los días, para tener una rutina. No utilices el móvil o Tablet en la cama. Intenta mantener la casa lo más fresquita posible si no tienes aire acondicionado. Ventila por la noche y no dejes que dé el sol en las horas centrales del día -baja las persianas, cierra las cortinas y baja el toldo-.
Asimismo, procura no beber alcohol, y consume mucha agua y zumos, así como bebidas frías y sin cafeína. La alimentación es fundamental para conciliar el sueño. De este modo, evita los alimentos de altor valor calórico, que aumentan la temperatura corporal, y elige otros más ligeros, principalmente la fruta y la verdura. Importante: no comas mucho ni muy tarde.
Si practicas deporte por la tarde, procura no dejarlo para última hora, poco tiempo antes de dormir, y termina con ejercicios tranquilos como estiramientos, que resulten relajantes.
Si tienes mucho calor, date una ducha fresquita antes de dormir para reducir la temperatura corporal.
En caso de tener aire acondicionado, evita que el flujo te dé directo y mantén la temperatura por la noche entre 23 y 26 grados.