Los atropellos accidentales constituyen una de las principales amenazas para el lince ibérico, especie todavía amenazada de extinción. Por ello, la Junta de Andalucía ha puesto en práctica un innovador sistema para prevenir estas muertes: unas ‘vallas’ virtuales, que se activan automáticamente cuando las va a cruzar un animal, y que funcionan con emisores de infrarrojos.
La Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta de Andalucía ha instalado una barrera virtual en cuatro kilómetros de la A-312 en Vilches para evitar atropellos de linces.
Consiste en la colocación de sensores a los dos lados de la vía que detectan la luz de los vehículos a su paso por este punto concreto y activa una alerta sonora y también lumínica que llama la atención de los animales y los aleja de la carretera, según ha informado este lunes el Gobierno autonómico.
Se trata de una actuación enmarcada en el proyecto europeo Life Safe-Crossing, que tiene en la apuesta por las nuevas tecnologías una de sus claves y en el que la Junta es socia beneficiaria con el objetivo último de reducir el riesgo de atropello de fauna.
En este sentido, la Consejería ha anunciado la instalación de sistemas de prevención de colisiones animal-vehículo en cinco puntos diferentes de las carreteras de Huelva a Sevilla, de Córdoba y de Jaén, que vendrán a completar otros dos sistemas de base tecnológica destinados a reducir los atropellos de linces ibéricos en la comunidad y que ya están operativos.
El proyecto Life ‘Safe-Crossing’ pretende demostrar la utilidad de herramientas basadas en nuevas tecnologías y que, a la postre, son menos costosas que otras soluciones adoptadas anteriormente, para reducir el riesgo de colisiones de tráfico con la fauna silvestre y en especial, con el lince ibérico, además de mejorar la conectividad de sus poblaciones en el ámbito territorial en el que se implantan.