La Comisaría Provincial de la Policía Nacional, a través de su portavoz, Diego Moya, invita a la peña de animación Infierno Azulillo a que denuncie ante la Justicia cualquier acto de «vejación», «abuso de autoridad» o violación de los «derechos y libertades» de sus miembros por parte de los agentes destinados a los partidos de Linares en casa.
En declaraciones a este periódico, el responsable de Comunicación de la Policía en la provincia aclara que los funcionarios están para velar por la seguridad de todos los espectadores y hacer cumplir la legislación vigente. E insiste en que si algún agente se ha excedido en sus funciones, el colectivo tiene la vía legal para denunciar cualquier tipo de abuso.
En este punto, recuerda que la labor policial es garantizar los derechos y libertades de los ciudadanos y evitar actos que vulneren Ley contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte.
Esta situación llega después de que Infierno Azulillo emitiera un comunicado en el que manifiesta su malestar por la «represión» y «persecución» que sufre por parte de las fuerzas de orden público, más en concreto por la Policía Nacional, en el Estadio Municipal de Linarejos. De hecho, la peña ya ha anunciado su intención de dejar de animar en el fondo (Norte o Santana) en el que se ubican, debido a la «represión y persecución» que aseguran estar sufriendo.