El Linares ha vuelto a la zona apacible de la clasificación del Grupo I de Primera Federación después de encadenar dos victorias consecutivas. Con 45 puntos y séptimo en la tabla, tiene prácticamente en el bolsillo la permanencia, por lo que puede aspirar a cotas mayores, como una plaza para la próxima edición de la Copa del Rey.
Lo de meterse en la promoción de ascenso a Segunda División está mucho más complicado, debido a la ventaja de siete puntos (más el gol average) que le saca el Real Celta de Vigo B al conjunto de Alberto González que este sábado, a partir de las siete de la tarde, tiene una de las citas más importantes del curso frente a un Córdoba CF venido a menos.
Al combinado de Germán Crespo, que sigue en el cargo, a pesar de la pésima racha de resultados de la segunda vuelta, se le va la vida misma en este duelo andaluz, puesto que sus opciones de luchar por el play off pasan de manera inexorable por vencer en Linarejos.
Cuatro partidos más en casa para los azulillos, que tendrán que recibir al Rayo Majadahonda, al CD Badajoz, al Deportivo de La Coruña y al San Fernando, equipos que en el caso de los coruñeses se juegan el ascenso, mientras que los pacenses llegan a esta recta final del campeonato con la soga al cuello.
Lejos de casa el calendario no es menos complicado. Viajarán a Alcorcón, líder y principal candidato al salto de categoría de forma directa, Mérida y San Sebastián de los Reyes, ambos alejados del descenso, aunque sin confiarse demasiado.
Tal y como esta la competición, cualquier cosa puede pasar, pero lo cierto es que el Linares llega en franca mejoría tras una serie de derrotas que hicieron pensar lo peor.