El consejero de Universidad, Investigación e Innovación, José Carlos Gómez Villamandos, ha defendido el «gran esfuerzo» realizado para elaborar el nuevo modelo de financiación de las universidades públicas de Andalucía y ha subrayado que incluye «explícitamente» la subida salarial a través de una «cláusula de salvaguarda».
Así lo ha indicado este miércoles en Jaén, donde ha visitado el grupo empresarial Integración Sensorial y Robótica (ISR), y a preguntas de los periodistas después de que los rectores de las universidades públicas andaluzas hayan pedido añadir, a la dotación adicional de 14 millones de euros, la cantidad necesaria para abordar «la obligada subida salarial del 0,5 por ciento».
«Me sorprende enormemente ese comentario por parte de los rectores. Ellos saben perfectamente que hay una cláusula, que es una cláusula de salvaguarda, donde explícitamente se señala que las retribuciones tendrán incorporados los incrementos retributivos marcados por la Administración General del Estado, con lo cual es que eso ya está incluido. Y, además se le ha informado repetidamente», ha dicho.
En este sentido, ha considerado que todavía hay «algunas reminiscencias del pasado» y «a algunos sectores les cuesta mucho reconocer el gran esfuerzo que se ha realizado por un gobierno del Partido Popular» y en el que, además, «ellos han participado de una forma muy activa, con más de 50 horas de negociación».
«Está todo recogido y no hay ningún problema», ha afirmado Gómez Villamandos, quien ha recordado que estos acuerdos sobre aumento salarial «se toman a nivel estatal entre el Gobierno central y la representación sindical».
Ha añadido que «suponen un incremento importante» y, «sin embargo, ni se ha tenido en ningún momento en cuenta las comunidades autónomas ni se ha incrementado la financiación de las comunidades». «Puesto que si tú haces ese incremento, invita el Gobierno Central y paga Andalucía», ha apostillado.
El consejero ha precisado que no se está en contra de ese incremento, sino que lo que se pide es que «se produzca» esa «necesidad de financiación», con «más de 2.000 millones al año», que la Junta viene «reclamando desde hace años al Gobierno central y que Andalucía no recibe».
Por otro lado, ha señalado que «las universidades son organismos autónomos» y, «ni en su organización y su funcionamiento, ni es salud, ni es educación o cualquier otra estructura propia de la Junta Andalucía».
«Cuentan una financiación que, insisto, se va a incrementar en ese 0,5 por ciento, pero también ellos cuentan con una financiación. No hay que olvidar que las universidades generan remanentes, dinero que no se gasta todos los años y dinero que se pone a su disposición para el servicio a la sociedad andaluza. Con lo cual, con todo eso son las variables con las que tenemos que jugar», ha manifestado.
UNIVERSIDADES PRIVADAS
Por otra parte, el consejero se ha referido a la creación de nuevas universidades privadas que se implanten en Andalucía y ha señalado que «hay dos que ya están aprobadas, queda aprobarlas por el Parlamento» y hay otras dos que están «ahora mismo en trámites».
«Son universidades que las solicitudes se realizaron en la legislatura anterior, que se están tramitando, que no tiene nadie que tener sospechas sobre la calidad de estas universidades. Este trámite tiene un trámite de calidad, pero el trámite de calidad importante viene cuando se da el inicio de actividad», ha apuntado.
En este sentido, ha explicado que «ahora mismo no se les permite abrir puertas» y «lo único que se les permite es que inicien una serie de trámites», donde «los controles de calidad son exactamente igual» que para las universidades públicas.
«Me preocupa mucho más la competitividad o la competencia innecesaria entre universidades públicas», ha declarado el consejero, quien ha considerado que es fruto de la «falta de previsión y de estrategia por los gobiernos socialistas», de la que por ejemplo ha sido «víctima» el campus de Linares.
«La Universidad de Jaén tenía una serie de titulaciones que eran punteras, que tenían un gran atractivo, como tenemos Ingeniería Civil, y de pronto se abre en otra universidad grande y entonces todos los estudiantes se van a una universidad grande», ha indicado.
Ha explicado que, con el decreto de ordenación de enseñanza, se han «establecido unas normas de juego en las cuales no va a haber esa universidad grande pública que se come las oportunidades que genere una universidad más pequeña también de carácter público.
«Con las privadas no hay competencia, os lo puedo asegurar. Vengo de una universidad de tamaño medio, como la Universidad de Córdoba con una universidad privada, la única privada en Córdoba, y no ha supuesto ninguna merma para la universidad pública. Al contrario lo que ha hecho es de un estímulo para aumentar la competitividad y calidad», ha zanjado.