Pedro Bolaños se sentará este domingo, a partir de las seis de la tarde, en el banquillo de Linarejos. En principio, su presencia será circunstancial hasta que el club encuentre el técnico encargado de sustituir a Óscar Fernández, despedido el pasado miércoles a causa de los malos resultados.
Bolaños, que llegó el pasado verano procedente del Atlético Mancha Real, ha preparado la difícil prueba frente al combinado alicantino dentro de la normalidad que este tipo de situaciones. Su objetivo no va más allá de la decimocuarta jornada y no es otro que sumar los tres puntos.
El preparador manchego tiene claro que «es el momento de estar unidos» y pide a la afición que se guarde el malestar por la racha negativa y apoye a los futbolistas. «Esa rabia o enfado debemos convertirla en aplausos, porque todos somos conscientes de que la permanencia pasará por casa. La afición siempre está y la necesitamos más que nunca», señala.
Enfrente tendrá a un colectivo que acumula ocho jornadas sin perder. Además, su entrenador es un viejo conocido de la hinchada azulilla, Alejandro Sandroni. El técnico hispano-argentino también ha valorado el duelo del domingo y ha advertido: «Para competir ante el Linares tenemos que ser más equipo que nunca».
En este punto ha dejado claro que el cuadro minero es un rival altamente competitivo en su estadio. «Independientemente de la situación del equipo, Linarejos es un campo donde es muy complicado todo. La afición empuja y aprieta y el equipo local no se cae nunca de los partidos. Han sido capaces de ganarle al Ceuta y al Castilla, es un equipo muy competitivo que nos exigirá lo mejor», ha avisado.
«Es el momento de seguir apretando, exigiendo y mejorando, es lo que nos va a mantener en la posición donde estamos y progresar», ha insistido Sandroni, quien ha puesto en valor el trabajo y la progresión de su plantilla.