Francisco José Carnicer Magán (Linares, 1991) se despidió de Linarejos con más pena que gloria. Los problemas físicos empeñaron su última etapa en el club azulillo. Llegó en el mercado de invierno, tras rescindir con la AD Ceuta, en la que apenas dispuso de minutos, como revulsivo para intentar salvar la categoría.
Sin embargo, una antigua lesión, con numerosas recaídas, impidió al mediocentro linarenense rendir y mucho menos ayudar en el campo. Su papel en el club fue más testimonial y motivador en el vestuario que otra cosa. De hecho, con el descenso se acabó su estancia en la entidad en la que se había criado como futbolista.
El canterano se marchó sin hacer ruido y se puso a entrenar por su cuenta para no perder la forma e intentar volver a los terrenos de juego. Con el curso ya en marcha, trató de buscar acomodo en alguna plantilla. Tuvo ofertas de equipos de Madrid, pero, finalmente, ha sido el CF Motril, del Grupo IX de Tercera Federación, el que ha contratado sus servicios para intentar lograr el salto de categoría.
¡Oficial! ‼️
— C.F. MOTRIL (@CFMOTRIL) September 27, 2024
🤝🏻 Fran Carnicer, se convierte en nuevo jugador del CF Motril.
ℹ️ Procedente del Linares Deportivo de 1ºRFEF, como jugador tiene una impresionante trayectoria, acumulando numerosas participaciones en play off de ascenso e incluso consiguiendo ascensos, pic.twitter.com/S3Hqi6iRsH
Carrera
La primera vez que Fran Carnicer fue del Linares era un chaval de 18 años. Estaba en el juvenil de Liga Nacional y los problemas económicos del club, que lo llevaron a su refundación en septiembre de 2009, le obligaron, como a otros muchos canteranos, a poner tierra de por medio en busca de mejores oportunidades para su carrera deportiva.
Luego inició un periplo que lo llevaría a disfrutar de la pelota con ascensos a Segunda División y partidos en el fútbol profesional. Pero, siempre tuvo la espina clavada de no triunfar ante su público. Esa suerte cambió en el verano de 2019, cuando el destino quiso una llamada desde Linares trastocaría su vida. El conjunto azulillo estaba por aquel curso en Tercera, aunque con serias aspiraciones de ascender.
Su regreso a Linarejos no fue fácil. Le costó adaptarse a la categoría y nunca congenió con Juan Arsenal, quien el partido de play off frente al Real Jaén lo mandó a la grada ante el asombro de propios y extraños.
La situación de Fran Carnicer dio la vuelta por completo con el retorno a la División de Bronce. La llegada al banquillo de Alberto González supuso para el canterano recuperar la ilusión por el fútbol y su progresión fue espectacular hasta tal punto de convertirse en intocable en el once titular.
Una enfermedad estuvo a punto de costarle no solo su carrera, sino la propia existencia. El mediocentro sacó el coraje suficiente para curarse y retornar a los terrenos de juego con tanta fuerza que la temporada 22/24 firmó quizá, uno de sus mejores años como profesional, que no culminó con el ascenso a Segunda División, porque se cruzó en su camino el Deportivo de La Coruña.
