Hace un mes, ni los más optimistas de Linarejos podían imaginar que su equipo llegaría a la recta final del campeonato con posibilidades reales de disputar la promoción de ascenso a Primera Federación. Sin embargo, el empate frente al Cádiz Mirandilla y las dos victorias consecutivas ante el Orihuela y el Águilas han metido de lleno al conjunto de Pedro Díaz en la lucha feroz por los playoffs. Eso sí, el Linares no depende de sí mismo para obtener la clasificación.
En principio, salvo sorpresa mayúscula, el FC La Unión Atlético, equipo revelación del Grupo IV de Segunda Federación, está a una victoria de certificar el salto de categoría. El Juventud de Torremolinos, a cinco puntos del líder, tiene prácticamente asegurado el billete para las eliminatorias, al igual que Club Atlético Antoniano, si bien el combinado de Lebrija no se puede dormir.
La pelea real por las otras dos plazas queda en manos del UCAM Murcia (51 puntos); Xerez Deportivo (49); Estepona (48); Almería B (48) y el Linares, con 46 puntos, cerrando el grupo de aspirantes. A estas alturas de la competición, salvo el Don Benito, ya descendido matemáticamente, la mayoría de clubes se juega algo, por lo que hablar de calendarios fáciles para los equipos en liza es complicado y atrevido.
Lo que queda claro es que si el combinado azulillo quiere alargar la competición o optar a una hipotética plaza en la próxima edición de la Copa del Rey está obligado a ganar los tres enfrentamientos que le quedan. El primero será el próximo domingo, a las doce del mediodía, en el Municipal de La Línea de la Concepción frente a una la Balona del exazulillo Romerito casi desahuciada a la que solo un milagro mantendría en la categoría.
Ante el Linares se juega su última bala, por lo que el duelo es a cara de perro para los dos equipos. Lo mismo sucederá, a la semana siguiente, en Linarejos con la visita del Villanovense que, en las dos últimas fechas, se ha reenganchado a la salvación. De sumar los seis puntos, los de Pedro Díaz se medirían en Chapín con el Xerez CD en un choque de infarto. Cualquier cábala es posible en estas tres jornadas, pero todo pasa por ganar, ganar y volver a ganar.
