Este lunes había más ajetreo del normal en la calle Viriato. Una cuadrilla de operarios ha llegado a la zona para empezar a colocar los andamios antes de iniciar la reparación del tejado de la parroquia de San Francisco, cuyo estado está muy dañado. Los trabajos durarán aproximadamente unos cuatro meses y la comunidad del templo pide ayuda para sufragar para del total del presupuesto.
La reforma, según explica el párroco Manuel Alfonso Pérez Galán, consistirá en el reemplazo de vigas antiguas y el uso de materiales más modernos y seguros, para prolongar la vida útil del techo. Asimismo, se pondrán soluciones para prevenir humedades y el riesgo de incendio, con la instalación de materiales tratados y ligeros.
Para pagar las obras, la parroquia aporta de fondos 150.000 euros, pero necesita la misma cantidad para hacer frente a la factura. Por eso, ha emprendido una campaña de donativos para que los linarenses que lo deseen colaboren en esta causa, que va más allá de la confesión religiosa, pues se trata de un edificio con un enorme valor patrimonial para la ciudad.
El cura ha establecido contactos con el Ayuntamiento y la propia Diócesis de Jaén para que cooperen en la medida de lo posible con esta intervención, porque, en opinión de Manuel Alonso, «toda ayuda es poca».
Esta obra pertenece a una primera fase, ya que hay pendiente otra que afectaría a la cubierta de la nave de la iglesia, con una inversión estimada de 295.000 euros.
Las aportaciones se pueden realizar mediante transferencia a la cuenta de Caja Rural de Jaén ES40 3067 0045 0322 4104 7816, Bizum (07567) o en la página web www.donoamiiglesia.es.
