La plantilla del Linares regresa este lunes 29 de diciembre a los entrenamientos tras el parón por las fiestas navideñas con la mirada puesta en el partido del domingo (12 horas) frente al Melilla, último de la primera vuelta del Campeonato Nacional de Liga en el Grupo IV de Segunda Federación. Un partido decisivo para ambas escuadras inmersas en la lucha por la permanencia.
Pero no solo el club azulillo está pendiente del terreno de juego. También tiene un ojo puesto en los movimientos del mercado de invierno. La necesidad de reforzar la plantilla es evidente si el equipo quiere lograr la salvación sin pasar apuros hasta el final de competición.
El propio Pedro Díaz ha reconocido esta demanda de apuntalar determinadas posiciones, pero también es consciente de que los recursos económicos de la entidad son más bien escasos, por lo que la dirección deportiva deberá atinar muy bien a la hora de contratar nuevos futbolistas. «Hay que ser realistas. No podemos firmar ahora a siete futbolistas. Queremos hacer algún retoque, pero tenemos que hilar muy bien porque el presupuesto es escaso», subrayó el preparador de Talavera en la rueda de prensa previa al choque en Puente Genil, que acabó con empate a uno.
«La dirección deportiva está haciendo su trabajo. Si hay algo en el mercado que nos pueda reforzar y mejorar lo que tenemos, trataremos de hacerlo, pero no podemos volvernos locos. Hay que acertar con lo que traigamos. Si traemos algo, tiene que ser que mejore lo que tenemos», añadió.
Lo que está claro es que si se producen llegadas habrá salidas. Las estadísticas dicen que Pedro Díaz no tiene confianza en determinados miembros del plantel, con los que apenas cuenta. Con el paso de los días, se irán conociendo tanto las altas como las bajas de un equipo que encara el nuevo año en el alambre.