Cien días. Este es el tiempo que falta para que Linares vuelva a citarse con las urnas en unas elecciones municipales que dictaminarán el 28 de mayo cuál será la composición de la Corporación para los próximos cuatro años.
Lo que queda meridianamente claro, al margen de las encuestas internas, es que el actual tablero político del Ayuntamiento no se repetirá y la tendencia lleva a pensar de que serán PSOE y PP los que se disputen, cuerpo a cuerpo, la Alcaldía, con la posibilidad de que la suma de concejales no dé y tengan que recurrir a un pacto de Gobierno.
Eso sí, sin un compañero de viaje con tantos votos como obtuvo Ciudadanos en los comicios de 2019. La formación naranja se ha diluido como un azucarillo y su presencia en el municipio se mantiene gracias al empeño de Pedro Cintero, su cabeza de lista, y Rafael Funes. Ni Antonio Barrios, ni Juan Antonio Manjón, ni María Teresa López cuentan para la candidatura y su periplo político acabará con casi toda seguridad dentro de 100 días.
En cualquier caso, estamos ahora en una fase en la que casi todos los partidos tienen ya prácticamente cerrados a sus principales candidatos, a los que han ido presentando poco a poco e incluso con suspense, como en el caso del Partido Popular.
La formación conservadora ha hecho un verdadero «encaje» para dar cobijo al exalcalde, Raúl Caro-Accino, que se afilió al partido 24 horas antes de que el presidente provincial, Eirk Domínguez, desvelará el nombre del candidato.
Al anterior regidor y exgerente de la Cámara no le ha importado ‘cambiar de principios’ con tal de seguir vinculado a la vida municipal, a pesar de que, como él mismo ha reconocido en numerosas ocasiones, «no soy político».
Quizá la única incógnita que queda por dilucidar a corto plazo sea la identidad del aspirantes a alcalde de Cilu, la única formación que ha mantenido el tipo en el mandato, a pesar de «todas las hostias que se han llevado» a lo largo de estos cuatro años, tal y como reconoce un alto cargo del partido localista a este periódico. Javier Bris está por la labor de repetir, pero no le importaría dejar su sitio a otro compañero o compañera.
En cuanto a Vox, que sigue luchando con entrar en el arco municipal, el nombre que más suena para el principal puesto de salida es el de Alberto Grajera. De momento, es el único que ha dado un paso al frente para encabezar la lista.
Otra de las interrogantes por desvelar es si Podemos, IU y Más País concurrirán juntas a las elecciones. Todo indica que sí, que quieren unir el voto de las corrientes de izquierda. Falta por formalizar el acuerdo.
El tiempo pasa y ya va quedando menos para conocer cómo quedará el tablero final del juego de cara al 28 de mayo. Después vendrá la campaña, la jornada electoral y, en función del resultado, la negociación posterior que puede dar finalmente el bastón de mando a un bloque o a otro si no se consiguen mayorías absolutas.