El primer presupuesto de Ciudadanos y Partido Popular del mandato será de lo «más expansivo», con un 21 por ciento de aumento de la inversión, una cifra comparable a años de previos a la pandemia y que recuerda que las elecciones están a poco más de un año de distancia. La subida se dedicará a reforzar el empleo público, las infraestructuras y las políticas sociales. Todo ello con un único fin: mantener la senda de la recuperación económica, según el bipartito.
El Ayuntamiento de Linares, a través de la Delegación de Economía y Hacienda, ha presentado este jueves el proyecto de presupuesto para 2022 que llega después de dos años con las cuentas prorrogadas y en la misma semana en la que el PSOE ha anunciado su intención de explorar la posibilidad de presentar una moción de censura contra el alcalde, Raúl Caro-Accino.
El presupuesto del Consistorio linarense para el presente ejercicio asciende a 54,5 millones de euros, un 7 por ciento más que en 2020. De estos, casi seis millones son para inversión, que sube en un 21 por ciento respecto al anterior.
En estas cuentas municipales las partidas dedicadas a personal crecen en un 8 por ciento comparado con 2020, hasta 20,6 millones de euros. En este punto destaca la creación de 41 plazas para cubrir la demanda del Parque de Bomberos (14); Infraestructuras y Servicios (9); la Policía Local (5) y el cuerpo de técnicos y administrativos (13).
Según ha explicado la concejal del ramo, Noelia Justicia, crece también la apuesta por los equipamientos, con la reconstrucción del Mercado de Abastos Santiago, y las políticas sociales, en las que el Ejecutivo de Caro-Accino pondrá especial interés, al igual que en las ayudas a autónomos y emprendedores.
Otras inversiones importantes se refieren a los dos grandes proyectos que cuentan con el impulso económico de la Junta de Andalucía. En primer lugar, el borrador de cuentas municipales recoge más de 1,3 millones de euros correspondientes a las primeras labores de rehabilitación y demolición previstas en el complejo industrial de Santana y, por otro lado, la cofinanciación municipal comprometida para la remodelación del Estadio de Linarejos.
Negociación
Una vez presentado el proyecto de presupuesto para 2022 llega lo más difícil para la concejal de Economía y Hacienda: convencer a la oposición de que estas cuentas son las mejores para la ciudad y los linarenses.
De entrada, y con una moción de censura en el horizonte, mucho tienen que cambiar las cosas para que sus adversarios políticos den el visto bueno al presupuesto, partiendo, además, de un Gobierno en minoría. Por tal motivo, el camino del borrador hasta su aprobación puede ser tortuoso, salvo que aplique cintura y mano izquierda para aceptar las enmiendas que planteen los distintos grupos de la oposición.
En caso contrario, este presupuesto, que Justicia define como «responsable y responde a las demandas de la ciudadanía», esta abocado al fracaso antes de llegar al pleno.