Cocaína, marihuana, hachís, éxtasis, ansiolíticos… Estas son algunas de las sustancias que el Grupo de Estupefacientes de la Comisaría de la Policía Nacional de Linares halló en distintas estancias de un piso de la zona de la plaza de toros.
El trasiego del portal delató lo que ocurría. Los investigadores ya le había echado el ojo a ese sitio como punto de venta, pero la denuncia de los padres de una menor aceleró la solicitud de una orden de entrada y registro al Juzgado de Guardia. Las labores de vigilancia confirmaban las sospechas de los agentes, por lo que decidieron actuar y detener al inquilino de la vivienda en la entrada al bloque.
Los funcionarios inspeccionaron a fondo el inmueble. En la mesa salón encontraron coca esparcida, otras drogas y utensilios y productos para la preparación de dosis. Una exploración más profunda en las habitaciones les llevó a completar el listado de sustancias ilegales en posesión del morador de la casa. La imagen de todo el conjunto era más perturbadora de lo que cabría suponer a primera vista.
La diferencia de este golpe al menudeo, en el marco de la operación ‘Albero’, radica en la presencia de menores. Dos adolescentes habían estado días antes en la vivienda. El camello llegó a pagarles el taxi para que acudieran, supuestamente, a consumir. Una de ellas se marchó cuando notó que la ‘fiesta’ a la que fueron invitadas incluía connotaciones sexuales. Su amiga, en cambio, se quedó.
Delante de sus padres, las niñas, de entre 16 y 17 años, relataron a la Policía lo ocurrido y como el arrestado se insinuó, presuntamente, a una de ellas, a la que llegó incluso a incitar para que bajara a vender droga a un cliente.
Durante el registro, se intervinieron de un pequeño alijo de droga, entre la que había tusi o cocaína rosa de moda entre los jóvenes, así como objetos para cortar y cocinar las sustancias. Igualmente se localizaron cantidades del fármaco Rivotril y otros ansiolíticos que se mezclan con hachís para potenciar el efecto adormecedor de ese derivado del cannabis.
Una de las menores pasó 24 horas en el hospital, donde el informe toxicológico desveló que había consumido varios tipos de estupefacientes. El detenido fue puesto a disposición judicial.
Fotos: Policía Nacional
