La todavía junta directiva del Linares no ha escatimado en esfuerzos ni recursos para reforzar el plantel con vistas a obrar el milagro de la permanencia. El último día del mercado invernal fue una auténtica locura en las oficinas del club, con las salidas de Lucas Suárez y Álex Oyón, que regresan al Sporting de Gijón tras media temporada cedidos, y de Teddy Campbell, que se despide de Linarejos con mal sabor de boca después de la desafortunada acción en el último suspiro en el partido del pasado domingo en el Alfredo Di Stéfano.
Por el contrario, el Linares anunció a última hora de la noche las incorporaciones del media punta Gonzalo Guzmán (20 años), procedente del Real Jaén de Tercera Federación, donde apenas ha jugado, y del extremo derecho Inach Fernández (21 años), del San Juan navarro, de la Segunda Federación, con el que ha disputado 21 partidos de Liga, once de ellos como titular. Tendrán ficha del filial.
Ambos se suman a la cesión de Fran Fernández, del Sport Clube União Torreense, equipo de la Segunda División de Portugal, donde no ha gozado de demasiadas oportunidades. Antes, llegaron el lateral Ángel Martínez, el delantero Álvaro Vázquez y el mediocentro Fran Carnicer, quienes ya han jugado sus primeros minutos con la camiseta azulilla. Todavía no lo ha hecho, y le queda al menos una semana más para ello es Gonzalo Panadero, que sigue cogiendo el tono físico.
La clasificación ha dictado sentencia en el ecuador de la Liga y para el Linares ha sido una obligación acudir al mercado de enero para encontrar argumentos que ayuden a cambiar dinámica de la competición. En cierto modo, la institución azulilla ha reconocido que se equivocó en verano y ahora trata de enmendar la plana con la mayor incorporación de refuerzos en el mercado invernal desde los tiempos de Delfín Cañas.