Los problemas técnicos, los errores de cálculo o el enredo burocrático complican el cumplimiento de los calendarios previstos en las obras públicas antes de su inicio. Se anuncian plazos que frecuentemente se incumplen.
En Linares ocurre con demasiada frecuencia en intervenciones municipales, como el tramo de acerado de la Plaza Colón que da a la calle Viriato, en el que se van a invertir más de dos meses de trabajo para su renovación.
Las obras han sufrido varias interrupciones por diversos motivos, pero, según ha podido saber este periódico, ya está en su recta final y, posiblemente, quedarán rematadas la semana que viene, una vez se incorporen, este viernes, los nuevos trabajadores del Programa de Fomento del Empleo Agrario (PFEA) de 2024, con el que se ha pagado la actuación.
La idea de las autoridades municipales es mantener los estacionamientos, así como reservar uno para los titulares de la tarjeta de aparcamiento de vehículos para personas con movilidad reducida, como había antes.
La adecuación de la acera ha permitido, en cualquier caso, mejorar la accesibilidad, además de presentar una imagen homogénea con el resto del espacio público. Asimismo, se han instalado farolas de bajo consumo que potenciarán la luminosidad de esta zona de la calle Viriato, muy frecuentada por linarenses y visitantes.
Alucinante… Dos meses, 60 días, para cambiar un tramo de acera de menos de 100 metros… Lo que pasa es que hay mucho gandul viviendo del cuento… Menuda cuadrilla, normal q alguno no encuentre trabajo… O mejor dicho, prefiera no encontrarlo