La vigésimo séptima jornada del campeonato en el Grupo II de Primera Federación ha dejado clara una realidad: hay tanto en juego que cualquier tropiezo puede costar caro, no solo en la zona baja de la tabla, sino en la lucha por el ascenso.
La permanencia hasta hace pocas fechas era cosa de tres o cuatro clubes. Sin embargo, tras el mercado de invierno, todo ha cambiado. El Linares y el Mérida, los que más han apuntalado sus plantillas, han remontado el vuelo miran de cerca la salvación, mientras que entran en juego otros equipos.
La distancia entre continuar en la tercera categoría del fútbol español y bajar a las catacumbas de Segunda Federación está en un pañuelo. Los filiales del Real Madrid y del Atlético de Madrid han visto complicada su situación en la segunda vuelta, en la que solo han sumado 8 de los 24 puntos en juego.
La línea más pronunciada hacia abajo la protagoniza el San Fernando que, al final del primer tramo liguero, aventajaba al Linares en nueve puntos y que, después de perder en casa frente al Mérida (0-1) y de una pésima racha de ocho partidos sin ganar, está a tres del Linares y a cuatro de su rival de este domingo.
Nadie está libre de sufrir en este Grupo II. Ni siquiera el Algeciras, equipo al que visita el conjunto azulillo el próximo sábado (16 horas), puede dormirse en los laureles, porque esos ocho puntos que tiene de margen se pueden quedar en cinco si los de Campaña son capaces de regresar con el triunfo.
Así las cosas, cada encuentro será, a partir de ahora, a cara de perro para los que buscan la salvación y para los que pretenden estar el curso que viene en la Liga de Fútbol Profesional, porque el Córdoba está llamando a la puerta del ascenso directo tras el empate del Ibiza, que sigue en crisis, y la derrota del CD Castellón en Alcoy.