Quedan nueve jornadas para que acabe el Campeonato Nacional de Liga en Primera RFEF, a las que el Linares debe sumar dos encuentros aplazados. El primero de ello será este miércoles, a las ocho y media de la tarde, frente al Atlético Sanluqueño.
De esos once encuentros, cuatro son de manera prácticamente inmediata en Linarejos ante rivales directos en la lucha por la permanencia. Al citado contra el conjunto de El Palmar, le seguirán el Nàctic de Tarragona (2 de abril); el Llagostera Costa-Brava (10 de abril) y el Betis Deportivo, pospuesto de la fecha 28. De sacar esos doce puntos adelante, el cuadro de Alberto González daría un paso casi definitivo para asegurarse una temporada más en la tercera categoría del fútbol español.
El punto logrado en el Nuevo Mirador de Algeciras sabe a gloria después de la jornada del fin de semana, en la que, por ejemplo, los dos próximos adversarios azulillos, el Nàstic y el Sanluqueño no pasaron del empate a tres en el Nou Estadi Costa Daurada. El Sevilla Atlético también salvó con igualada su enfrentamiento en casa ante el Atlético Baleares (1-1), mientra que el Cornellà se llevó los tres puntos en su duelo regional frente al Costa Brava-Llagostera (2-0).
La Balona, por su parte, sumó un valioso empate en Madrid ante el Castilla, un resultado que pone a los linenses con 39 puntos, otro pasito más cerca de la permanencia.
Con todo, la afición linarense será determinante en las posibilidades de salvación de su equipo. Ahora más que nunca debe acudir en masa al Municipal para certificar una temporada histórica para el club de la Avenida Primero de Mayo. Eso sí, al igual que cuadro de Alberto González varios equipos mantienen partidos pendientes de jornadas anteriores aplazados por el coronavirus, lo que en cierta medida desvirtúa la clasificación actual.
