No existe mejor escenario en el país para representar ‘Loca’, la personal revisión de Pedro Güido sobre Juana I de Castilla, apodada «la Loca», que el Teatro Municipal de Almagro, localidad del Campo de Calatrava manchego donde la escena se convierte en pasión. Un lugar único para descubrir y disfrutar de montajes como ‘Loca’, que sigue cosechando éxitos allá donde va.
Obviamente para Pedro Güido y La Irremediable Compañía estrenar en la cuna del teatro clásico un relato desgarrador, pero a la vez de intenso y emocionante, entraña una responsabilidad enorme. Sin embargo, todo salió a pedir de boca y ‘Loca’ conquistó al exigente público de esta localidad que parece detenida en el tiempo, con un viaje sensorial a la España del Siglo de Oro.
El texto de Güido es una oportunidad para aquellos que están hartos de los 140 caracteres, de los mensajes simples, escuetos y sin argumento, para los que quieren vivir de verdad una lengua riquísima, maravillosa, llena de palabras que hacen sentir el teatro desde dentro.
En la ciudad del Corral de Comedias, una joya construida en 1628, ‘Loca’ encontró el escenario perfecto para representar la parábola de la vida de Juana I de Castilla, revelando una faceta profundamente humana del personaje que la convierte en un referente de fortaleza y vulnerabilidad de una mujer que rompió los convencionalismos de su época.
Pedro Güido y los actores se sintieron como en casa, puesto que estuvieron arropados por familiares y amigos de la Estación Linares-Baeza que desplazó un autobús lleno de vecinos a la función.
