Los usuarios de los autobuses urbanos de Linares van a asistir en los próximos años a la transformación de los vehículos en los que realizan sus recorridos diarios. La flota compuesta por buses movidos por combustibles fósiles irán desapareciendo paulatinamente de las calles de la ciudad y serán sustituidos por otros que usan la electricidad.
Así se lo trasladó el alcalde, Raúl Caro-Accino, al secretario general de UGT, Manuel Salazar, después de que este denunciara tiempo atrás deficiencias en el transporte público debido a la antigüedad de los vehículos. Según Salazar, la empresa concesionaria del servicio ya ha mostrado su intención de renovar por completo la flota con buses eléctricos y mudarse al Parque Empresarial Santana una vez que finalicen las obras de remodelación del recinto.
Para alcanzar el objetivo, el Ayuntamiento podrá acogerse a los fondos europeos Netx Generation destinados a movilidad sostenible y no contaminante, tal y como están haciendo otras ciudades. Con ese dinero, la ciudad podrá cumplir distintos objetivos vinculados a la mejora del transporte urbano colectivo, con la adquisición de unidades menos contaminante en términos de emisiones de gases de efecto invernadero.
Transportes Urbanos de Linares S. L., perteneciente al Grupo Ruiz, ya ha estado probando modelos eléctricos para su incorporación a la flota. Fue el pasado mes de septiembre con una vehículo de origen turco. La empresa concesionaria pretende consolidar su apuesta por la tecnología respetuosa con el medio ambiente y carente de emisiones de CO2 con la sustitución de los actuales unidades de combustión.