Lo advirtió el alcalde, Raúl Caro-Accino (Ciudadanos), y este viernes el presidente del Partido Popular, Erik Domínguez, lo ha ratificado: lucharán hasta el último segundo para frenar la moción de censura contra el regidor linarense.
Para ello, tanto el PP como Ciudadanos han recurrido la convocatoria del pleno, previsto para el 11 de marzo a las doce del mediodía, al detectar situaciones «que podrían ser susceptibles de que esta pudiera ser anulada». En concreto se refieren a la sentencia condenatoria que pesa sobre Daniel Campos, concejal socialista, exsecretario general del PSOE de Linares y candidato a la Alcaldía en 2019, por delito electoral al haber pedido el voto para su partido, públicamente, el día de los comicios. Por aquello fue condenado al pago de una multa de 1.080 euros así como a la inhabilitación especial para el sufragio pasivo durante seis meses.
Según Domínguez dicha sentencia «no se ha ejecutado, dada su baja médica» y, por tal motivo, podría provocar que el Campos no tuviera potestad ni para apoyar la moción de censura con su firma, como ya ha hecho, ni acudir a votarla al pleno del 11 de marzo.
«Las acciones judiciales ya están presentadas en el Juzgado. Se ha pedido que su señoría tenga a bien optar por medidas cautelares para que quede en suspenso el pleno mientras se dirime si cabe o no la moción de censura. Esto se hace por coherencia, ya que si hay un concejal que está privado de derecho a sufragio pasivo, creemos que no puede participar. Hay argumentos jurídicos y existen antecedentes similares», ha explicado Erik Domínguez en una rueda de prensa.
El presidente del PP provincial ha señalado que su formación será «respetuosa» con la decisión judicial que se produzca al respecto y, en caso de que finalmente se celebre el pleno de la moción de censura y esta salga adelante, los concejales linarenses de su partido «seguirán trabajando desde la oposición con lealtad a los linarenses y anteponiendo el interés general de la ciudad».
