Tano Bonnín buscó en Linares abrir una página en blanco en su irregular carrera profesional. Central de 33 años, llegó este verano procedente del US Vibonese Calcio, del Grupo I la Serie D italiana. Su contratación generó ciertas expectativas en la hinchada azulilla por su amplia experiencia y su pasado en el Osasuna, donde disputó 47 partidos oficiales entre Segunda y Primera División.
Fue titular en la primera jornada de Liga frente al Mérida y desde entonces poco o nada se ha sabido del defensa hispano-dominicano. Óscar Fernández ha sido esquivo cuando se le ha preguntado por él y se ha limitado a decir que está trabajando bien y es uno más de la plantilla.
Ahora, está lesionado. Sufre, según un escueto comunicado del club, una microrrotura en el sóleo de su pierna derecha que lo tendrá alejado de los terrenos de juego durante un tiempo indeterminado. Lo cierto es que esta dolencia, sumada a la falta de minutos cuanto menos despiertan serias dudas sobre su futuro.
En principio su contratación era para suplir el hueco dejado por Caro (UD Melilla) y Lolo González (AD Ceuta). Pero nada más lejos de la realidad. Tanto Javi Rentero como Molina se han hecho fuertes en la zaga y, a tenor de los hechos, Tano tendrá difícil ganarse un puesto en el once si las cosas siguen igual.
Su ausencia se suma a las dudas de Mawi Sánchez, que el pasado sábado ante el Algeciras se retiró lesionado, de Rafa Lorente y de otros jugadores que comienzan a acusar lesiones musculares. Todo queda pendiente de los entrenamientos pendientes antes de la difícil salida a El Palmar, donde el Linares se medirá con un rival directo en la lucha por la permanencia, el Atlético Sanluqueño.