El buen ambiente está garantizado en el primer derbi jiennense de la temporada. Este domingo, a partir de las 17 horas, las gradas del Nuevo Estacio de La Victoria podrían presentar un lleno hasta la bandera puesto que, además de los seguidores locales que acudirán a la cita ansiosos por ver el triunfo de su equipo, desde la ciudad mineral se desplazarán en torno a 500 aficionados.
La hinchada linarense ubicará la esquina entre el Fondo Sur y la Preferencia, el mismo lugar del campo de la última visita al campo lagarto que se saldó con goleada visitante por un tanto a cuatro, cuando ambos equipos militaban en el Grupo IX de Tercera División.
El Real Jaén ha anunciado que se han vendido ya 10.000 entradas, por lo que el lleno está prácticamente garantizado en uno de los partidos más esperados del año para las dos aficiones y ciudades.
Los hinchas linarenses saldrán del municipio escoltados por furgonetas de la Unidad de Intervención Policial (UIP) y regresarán de la misma manera una vez que finalice el partido y esté garantizado su regreso. Irán directamente al campo.
Los consejos de administración del Real Jaén y del Linares han lanzado un mensaje de «deportividad y rivalidad sana» a pocas horas de que ruede la pelota a las órdenes del colegiado sevillano Abraham Gutiérrez. Fue durante la tradicional comida de convivencia entre directivas, en la que reinó la cordialidad y la hermandad.
En representación del equipo local asistieron al almuerzo el presidente, Sebastián Moya; el director general y consejero delegado, Fran Anera; el portavoz, Manuel Medina, y los consejeros Juan Carlos Hidalgo y Paco Lopera, mientras que la expedición linarense estuvo encabezada por el presidente, Luis Vera, que estuvo acompañado por el director general, Carlos Hita, y el consejero y presidente de la Fundación Linares Deportivo, Javier Vallejo.
Casi a la misma hora, los entrenadores de ambos equipos, Manolo Herrero y Pedro Díaz, acompañados por uno de los capitanes de ambos clubes, Javi Moyano y Hugo Díaz, respectivamente, han posado con su camiseta y con la del rival en el Nuevo Estadio La Victoria en un claro llamamiento a la cordialidad y al civismo en el duelo del domingo.
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