Linares sigue avanzando en el camino para convertirse en una ciudad más sostenible. La consolidación de una zona de bajas emisiones se presenta como prioridad en la consecución de este objetivo. Su apuesta, que pasa por acotar el tráfico privado y los vehículos más contaminantes, ya está reflejada en el papel y en el anuncio previo de cuatro contratos -vía de urgencia-, por un montante total de 1.661.893,22 euros, para cumplir así con los dictados de la Unión Europea.
Cada una de esas intervenciones están financiadas con los fondos europeos Next Generation en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. El proyecto se divide en cuatro lotes diferentes y llegarán tanto al centro de la ciudad como a varios barrios, contribuyendo con ello a hacer de Linares una ciudad menos contaminante y más segura para los peatones.
El primero de los contratos, por valor de 335.110 euros, está destinado al desarrollo del programa para la implantación de la tarjeta ciudadana inteligente para la movilidad sostenible. El segundo, que cuenta con una inversión de 339.284,40 euros, es para la adquisición e instalación del sistema para 50 bicicletas y 25 cuadriciclos eléctricos y las estaciones que las alimentarán de energía.
Otros 477.950 de euros van destinados a todo lo relacionado con las señales y los equipos que regularán el tráfico rodado y mejora de accesibilidad en las áreas de influencia de la zona de bajas emisiones, principalmente el Centro Comercial Abierto. Y, por último, el contrato con mayor cuantía –509.548,82 euros– para el sistema de información, gestión y control de todo el sistema de control de acceso, red de comunicaciones, vigilancia y seguridad, entre otros aspectos.
Todos estos proyectos estaban contemplados en la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrado (Edusi), dotada con 12,5 millones de euros, que apenas ha experimentado avance alguno en los tres últimos años.
