Este lunes 25 de septiembre se cumplen los primeros 100 días de mandato del nuevo Ayuntamiento de Linares. Auxi del Olmo (PP) cumplió las expectativas el 28 de mayo y derrotó a Javier Perales (PSOE) tras una intensa campaña en la que fue de menos a más. El 17 de junio ya forma parte de la historia de la ciudad al coger el bastón de mando una mujer, aunque sin la mayoría suficiente de los linarenses.
Auxi del Olmo ganó en las urnas con menos diferencia de la esperada. Es más, al mes siguiente, el Partido Popular salió escaldado de las elecciones generales en las que de nuevo el PSOE fue la fuerza más votada en el municipio.
Queda mucho
Los primeros 100 días de Gobierno suponen solo el 6 por ciento de un mandato de cuatro años, por lo tanto, queda todavía mucho tiempo para hacer un análisis más en profundidad, pero lo cierto es que del Olmo no ha aportado demasiadas novedades a la política local, salvo la extensa galería fotográfico de sus actos de agenda y de sus concejales.
La mayoría de iniciativas que están en marcha provienen de procesos anteriores. La Zona de Bajas Emisiones, el Estadio de Linarejos, el corredor de Periquito Melchor o el derribo de naves del Parque Empresarial Santana son continuidad a gestiones realizadas en el pasado por sus predecesores.
Novedad no son los remanentes de Tesorería para el mantenimiento de la ciudad, ni tampoco la larga lista de actividades de distintas áreas que se presentan a diario.
Retos y apoyos
Encontrar la fórmula para sacar adelante el proyecto de presupuestos será el primer gran reto de Del Olmo como alcaldesa, a la que los datos socioeconómicos y demográficos no ayudan mucho, puesto que la ciudad lejos de avanzar, retroce.
Más allá de las fotos, los tuits y los martes con la alcaldesa, Auxi del Olmo se enfrenta a cuatro años cruciales para Linares, con una Junta de Andalucía mirando más hacia Jaén capital -el presidente provincial del partido es concejal de allí- y un Gobierno central, con casi toda seguridad en manos de la izquierda, del que poco o nada se puede esperar. Se hace necesaria, en consecuencia, mucha cintura política para que Juanma Moreno y Pedro Sánchez apuesten por la ciudad minera.
La dirigente municipal ha dado un paso interesante, y a la vez que demandado, tratar de unir a todas las fuerzas políticas en torno una idea común: Linares. Y lo ha hecho desde el diálogo, algo de agradecer en los tiempos que corren, en una ciudad de extremos y con políticos, salvo honrosas excepciones, instalados en la mediocridad que piensan más en su interés particular que en el general.
Habrá que esperar a ver la capacidad negociadora de Del Olmo para traer inversiones a la ciudad o al menos facilitar la implantación de empresas. De momento, no se ha visto el nivel político de la alcaldesa, a pesar de llevar tres mandatos en el Ayuntamiento, por lo que experiencia no le falta, como buena parte de su equipo de Gobierno que viene de periodos anteriores.