El Programa de Ayuda Alimentaria reparte este año en la provincia de Jaén 825.828 kilogramos de comida a personas en riesgo de exclusión social, con una valoración económica que asciende a 1.457.166 euros.
Así lo ha indicado este lunes la subdelegada del Gobierno de España en Jaén, Catalina Madueño, durante una visita al almacén de Cruz Roja en Jaén, acompañada del coordinador provincial. Ha agradecido la labor de esta entidad y del Banco de Alimentos, como organizaciones asociadas de Distribución, así como la de las 113 organizaciones asociadas de reparto.
Ha recordado que es una iniciativa que lleva a cabo el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, a través del Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA). En la segunda y última de fase del Programa FEAD, que comenzó en septiembre, se distribuirá el 60 por ciento de los alimentos correspondientes al ejercicio 2023: 590.099 kilogramos, con un valor de 1.064.918 euros y que beneficiarán a 21.019 jiennenses.
Esta cantidad se sumará a la ya repartida en la primera fase: 235.729 kilogramos de alimentos por valor de 392.248 euros; de modo que el FEAD repartirá este año en la provincia 825.828 kilogramos a las personas más vulnerables valorados en 1.457.166 de euros. Supone un aumento con respecto a 2022, cuando se distribuyeron 1.237.518 kilos de alimentos por valor de 1.253.642,75 euros.
Madueño ha explicado que el programa busca, entre otros objetivos, favorecer la inclusión social de las personas destinatarias. «Además, se constituye como un sistema complejo y esencial que garantiza el reparto de los productos por todos los municipios jiennenses en un tiempo establecido y con entrega directa, de forma gratuita para aquellas familias cuya situación económica o familiar les impide adquirir alimentos de forma regular», ha afirmado.
La adquisición de los alimentos se ha llevado a cabo por parte del FEGA a través de un proceso de licitación. El programa está financiado en este año en su totalidad por el fondo de recuperación y de resiliencia React-UE, del que se ha hecho uso para incrementar el apoyo al Fondo de Ayuda Europea para las Personas Más Desfavorecidas (FEAD), con el fin de abordar la situación de quienes se han visto afectados social y económicamente por la crisis de la covid-19.
Los alimentos, de carácter básico y no perecederos, que se distribuyen en esta segunda fase de distribución son: alubias cocidas, arroz blanco, cacao soluble, conservas de atún, conservas de carne, conservas de sardinas, fruta en conserva, galletas, garbanzos cocidos, macedonia de verduras en conserva, fideos, espaguetis, tomate frito, tarritos infantiles de fruta y de pollo, «de forma que resulta una cesta variada, equilibrada, nutritiva y saludable».
Este año 2023 es el último en el que el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación participa en la implementación de los planes del programa de ayuda alimentaria a las personas más desfavorecidas de la Unión Europea, en el que participa desde 1987 de forma ininterrumpida. A partir de 2024, los ministerios de Trabajo y Economía Social y de Derechos Sociales y Agenda 2030 serán los competentes para articular este modelo de ayuda en España.