El santuario de la Virgen de Linarejos Coronada esconde un patrimonio artístico de incalculable valor. La Fundación Caja Rural de Jaén es consciente de ello y no ha dudado en aportar su granito de arena para impulsar la investigación sobre su rico fondo y, de paso, sacarle brillo.
Por ejemplo, lo ha hecho con la restauración de los frescos del magistral Francisco Baños y de uno de sus discípulos Francisco Carulla, con un arduo trabajo de recomposición de las pinturas del presbiterio, obra de Carulla, y las del lateral oeste de la iglesia, conocida como puerta de San Francisco de Asís, creadas por Baños. El resultado final de estas labores convierten al santuario en un verdadero museo de dos de los muralistas más influyentes del siglo XX.
La Fundación Caja Rural da un paso más en su compromiso con el patrimonio de la ciudad y, en concreto, del santuario con un nuevo proyecto que se centrará en la restauración dos piletas de agua bendita, que se ubican en los accesos al santuario. De corte neocláisico, se encuentran deterioradas debido al paso del tiempo y la cal del agua.
De esta importante obra se encargará Ubedarte, una empresa especializada en este tipo de trabajos y que conoce a la perfección el templo de la patrona y alcaldesa perpetua de la ciudad. No en vano, por sus manos pasó la puesta en valor de las pinturas murales.
El convenio se firmó este miércoles, con la presencia del presidente de la Fundación, Patricio Lupiáñez; el rector del santuario, Andrés López Ángeles, y el restaurador, Manuel Martos (Ubedarte).