Cuando los resultados no acompañan y se suceden las derrotas, los estadios entonan el soniquete de rigor, es decir, el nombre del técnico de turno seguido del melódico «¡vete ya!». Este domingo sucedió en el Municipal de Linarejos después de caer el Linares a manos del Antequera en el tiempo de prolongación.
David Campaña no ha conseguido enderezar el rumbo del equipo desde que llegó a finales del pasado mes de noviembre para sustituir a Óscar Fernández, ambos técnicos sin experiencia alguna en Primera Federación y que procedían dos filiales de Tercera, el Sevilla C y el Almería B, respectivamente.
La política ‘low cost’ impuesta por el anterior presidente del club, Jesús Medina, impidió acudir al mercado a por un entrenador contrastado en la categoría y con capacidad de revertir la situación. David Campaña no ha sido el caso, como así demuestran los datos.
El preparador marbellí ha dirigido al Linares, hasta ahora, en 17 partidos de Liga y su bagaje se limita a cinco victorias, cuatro empates y ocho derrotas, con 19 puntos de los 51 posibles.
Durante prácticamente la vuelta que lleva en el banquillo de Linarejos solo ha tenido al equipo fuera de descenso una jornada, si bien fue después de unas pobres tablas frente al Melilla (0-0), y la alegría duró solo un partido, ya que, a la siguiente fecha, tras otra igualada ante el Málaga, el colectivo regresó a la zona que conduce de cabeza a Segunda Federación.
Si comparamos esos números desde una perspectiva global entre todos los clubes que componen el Grupo II de Primera Federación durante esos 17 encuentros, entre la jornada 15 y la 31, las cosas mejoran poco. El Linares estaría fuera del descenso, eso sí, pero solo un punto por encima del Intercity, y a uno del Real Madrid Castilla, a tres del Atlético Sanluqueño y a siete del Mérida. Curiosamente, el combinado emeritense estaba cuatro por debajo del Linares en la jornada 15 y ahora lo supera en tres.
Tampoco, porcentualmente, mejora a su predecesor Óscar Fernández, con el que el Linares ganó tres partidos, empató otros tantos y perdió siete (12 puntos de 39 posibles), y, en sus circunstancias, la situación clasificatoria invitaba algo más al optimismo, puesto que tenía a tiro de piedra al Sanluqueño, al Atlético de Madrid B y al Alcoyano, estos dos últimos prácticamente salvados a estas alturas del curso.
Otro matiz que dice poco del trabajo de David Campaña es que él ha podido reforzar la plantel, mientras que Óscar Fernández tuvo que tirar con un colectivo mal planificado, mal estructurado y con futbolistas sin hechuras para una división tan dura y competitiva como la Primera Federación.
