La Guardia Civil ha intervenido 60,100 kilos de pescado y molusco no apto para el consumo. La intervención se ha llevado a cabo en el transcurso de una inspección realizada en una empresa distribuidora de pescado, ubicada en el Polígono Industrial Guadiel, en el término municipal de Guarromán.
La actuación se enmarca en el Plan Anual de Control Integral de Actividades Pesqueras (Paciap), desarrollado por agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, en colaboración con inspectores de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de Andalucía.
Los productos entre los que se encontraba coquina, bonito, rape, nécora, bogavante y atún, carecían de cualquier etiquetado y trazabilidad que demostrara su origen lícito. Por ello se procedió a su inmovilización y depósito. Una vez examinado por los inspectores de la Delegación de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía, la mercancía fue declarada no apta para el consumo humano, y destruida posteriormente.