Un clásico se vive de manera singular, en el terreno de juego, en la grada y en el palco. Luis Vera experimentará el próximo domingo, a partir de las cinco de la tarde, las sensaciones de desprende un partido que levanta tanta pasión en las ciudades de Linares y Jaén.
Natural de Villanueva del Arzobispo, residente en Baeza, pero «minero de corazón», el presidente del club azulillo tiene plena confianza en Pedro Díaz y en la plantilla para obtener un éxito en el Nuevo Estadio de La Victoria. «Es tipo de partidos no entienden de clasificaciones ni estadísticas. Aunque el Real Jaén parte como favorito, tengo fe ciega en el equipo y estoy seguro de que vamos a obtener un buen resultado», asegura el mandatario a este periódico.
Luis Vera subraya que para los jiennenses debe ser un «orgullo tener un partido de este calibre». «Los dos equipos somos hermanos en la provincia. Que no falte tampoco la chispa y la rivalidad, pero nada más», asegura el dirigente, que destaca las «buenas relaciones» entre ambos consejos de administración. Por eso, traslada a las dos aficiones «respeto y, ante todo, deportividad». «Es un orgullo tener a estos dos clubes como embajadores, ya que llevan el nombre y el prestigio de la provincia a múltiples lugares de España», añade.
«La presión es la propia de un derbi. Son tres puntos importantísimos porque nos harían ubicarnos en la zona media de la tabla y afrontamos el choque con muchísimas ganas, pero no pasa de ser un partido de fútbol y una fiesta de todos los jiennenses», recalca el presidente azulillo.
Por último, insiste en que la plantilla que «sabe lo que nos jugamos, quién va a ser el rival y es consciente de lo que la afición exige a un club con nuestra historia», concluye Luis Vera.
