El Ayuntamiento de Linares ha iniciado los trámites para aprobar una nueva ordenanza reguladora de licencias urbanísticas. Uno de los principales objetivos que se persiguen con la modificación de la norma en vigor es el de actualizar y definir de la manera más clara y precisa posible qué actuaciones urbanísticas están sujetas a licencia, cuáles pueden realizarse con la presentación de una declaración responsable o comunicación y confirmar cuáles son los actos no sujetos a ninguno de estos controles municipales.
La medida impulsada por el departamento que dirige Antonio Garrido de Toro supone un paso muy importante para facilitar la concesión de licencias, así como los trámites para la ejecución de obras. No en vano, para constructores y particulares estas gestiones llegan a convertirse en una auténtica tortura burocrática.
La propuesta normativa se encuentra en consulta pública con el fin de conocer «los problemas que se pretenden resolver con la iniciativa, la necesidad y oportunidad de su aprobación, los objetivos de la norma y las posibles soluciones alternativas y no regulatorias», según recoge el anuncio publicado en la sede electrónica del Consistorio linarense.
La ciudadanía, organizaciones y asociaciones que así lo consideren pueden hacer llegar sus aportaciones, opiniones y sugerencias sobre los aspectos planteados o cualquier otro que consideren de interés, en el plazo de veinte días hábiles.
Con esta iniciativa, Linares busca fórmulas para agilizar la gestión urbanística, mejorar la atención a la ciudadanía y dar respuesta a las necesidades de desarrollo sostenible en el territorio. Todo ello después de detectar, de un tiempo a esta parte, una mayor actividad de ejecución de edificación y una demanda generalizada de cambio de la ordenanza.