Hace poco menos de una semana, el delegado del Gobierno andaluz en Jaén, Jesús Estrella, en una visita al yacimiento de Cástulo, dejó meridianamente claro los términos del acuerdo entre la Junta y el Ayuntamiento para liberar nueve millones de euros de subvención a la remodelación del Estadio Municipal de Linarejos. Y estos pasan de manera concreta por mantener la ubicación y acometer las obras de reforma para las que fue destinado el dinero público de todos los andaluces.
Otra cosa es el proyecto que se redacte para la ejecución de la ayuda y las trabas administrativas que deberá superar el Consistorio para comenzar los trabajos. Para ello, en principio, tenía 36 meses de plazo para acometer la intervención desde diciembre del pasado año. Sin embargo, la inacción del anterior equipo de Gobierno, que solo acreditó los papeles para solicitar la subvención y un vídeo promocional, ha hecho que, a día de hoy, solo se haya anunciado la licitación de la redacción del proyecto.
Las obras, en teoría y siguiendo el cronograma del convenio entre administraciones, debían estar acabadas y certificadas para junio de 2024, una posibilidad que, tal y como están las cosas, parece muy poco probable, por no decir imposible. Por este motivo, Jesús Estrella mostró su disposición a ampliar los plazos para que esos nueve millones se ejecuten de forma correcta y atendiendo las «demandas de los vecinos y aficionados de la ciudad», que ya han dejado claro que no se quieren mover de la Avenida Primero de Mayo.
La pelota está ahora en el tejado de la Administración local que debe sortear los obstáculos para solventar la intervención, consciente de que los hinchas seguirán en su ‘templo’. El problema es que renovar y remodelar el Estadio de Linarejos, como se ve en las imágenes, choca frontalmente con la legislación vigente. El Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) requiere de un cambio específico para poder acometer obras de entidad en la infraestructura deportiva.
El ‘anteproyecto técnico’ presentado al club por el anterior Gobierno municipal resulta del todo inviable de ejecutar conforme al marco urbanístico vigente y dicha variación no entra en los cálculos del alcalde, Javier Perales, según lo expuesto a preguntas de los periodistas y en el propio pleno.
Lo que si ha avanzado el regidor, a falta de remodelación integral, son los trabajos de mejora que se acometerán en la instalación para subsanar parte de las enormes deficiencias que presenta en la actualidad. Se realizarán a través de un contrato menor en próximas fechas.