Marcó un ante y un después en todos. Nos tocó de cerca. Se llevó por delante la vida de amigos y familiares. Destrozó hogares y alteró por completo nuestra existencia hasta tal punto de experimentar sensaciones desconocidas hasta ese momento.
Sin embargo, sin la colaboración de personas anónimas y del personal sanitario la pandemia hubiera sido aún más cruel de lo que fue. Baños de la Encina no quiere olvidar la lucha titánica en primera línea de aquellos días y, por ello, desde este jueves una escultura homenajea la «generosidad y valentía» de los vecinos y honra la memoria de las víctimas.
Al acto asistieron las principales autoridades del pueblo; entre ellas, el alcalde, Antonio las Heras, miembros del equipo de Gobierno, y representantes del Grupo Municipal del Partido Popular, como su portavoz, Ana Serna, y su homólogo de Izquierda Unida, Rafael Jurado.
En su discurso, el regidor llamó a «fortalecer todo aquello que la pandemia reveló como relevante» y destacó la importancia de «no olvidar ni a las víctimas ni a los profesionales que se dejaron la piel por ayudar a los demás».
En este sentido, Las Heras mostró su «admiración, reconocimiento y gratitud a todas las personas que atendían las necesidades básicas y urgentes del municipio», durante los peores momentos de la pandemia, desde los que mantuvieron la cadena de alimentación hasta los que se ocuparon de la limpieza de las calles.
La obra del escultor linarense José Ángeles preside la remodelada calle Ermita, donde el Consistorio ha creado un bulevar central para uso y disfrute de vecinos y visitantes. Representa varias manos entrelazadas que se dirigen hacia el cielo. «Es emocionante y a la vez gratificante comprobar de todo aquel enorme esfuerzo sirvió la pena», concluyó el regidor.
Fotos: Televisión Baños de la Encina