El Tecnigen ha sido en los últimos años el buque insignia del deporte linarense. El único equipo de la ciudad en la élite de cualquier disciplina deportiva y el único jiennense en competición europea, además de recibir, el pasado mes de diciembre, el premio como mejor conjunto femenino de Andalucía de 2022, gracias al título de campeón de Liga conquistado contra pronóstico ese año.
Una temporada aciaga, con idas y venidas de jugadoras extranjeras sin explicación alguna, ha llevado al Tecnigen a un descenso casi cantado, debido a una pésima racha de resultados y a confiar toda su suerte a una palista japonesa desconocida y a una joven jugadora sin experiencia en categorías tan competitivas como la Superdivisión. Solo ha mantenido el tipo su gran estrella, la rumana Roxana Istrate.
Bien es cierto que el fiasco de esta campaña no puede empañar los éxitos anteriores en la Liga, en la Copa de la Reina y en Europa, donde se ha codeado con los grandes clubes del tenis de mesa del viejo continente.
Así, no se puede olvidar que el Tecnigen ha sido en dos ocasiones subcampeón de la Copa de la Reina y en otras tantas medalla de bronce, al igual que en siete oportunidades ha sido cuartofinalista de la Copa de Europa-Ettu Cup.
En un comunicado, el club lamenta la pérdida de categoría y reconoce errores en la planificación de la temporada, aunque se aferra a la esperanza de posibles reestructuraciones en la competición.
Actualmente, el número de equipos participantes es impar, con once conjuntos, lo que complica la situación. Sin embargo, el club se compromete a trabajar y planificar con miras a ascender lo antes posible.
Una noticia positiva para el club es que el equipo masculino ha asegurado el liderato del grupo tres de División de Honor. El 25 de mayo, buscarán el ascenso a la máxima categoría en Linares, contando con el internacional español Carlos Caballero como referente.
