El alcalde de Linares, Raúl Caro-Accino, ha dado orden esta semana para que operarios municipales revisen todas las fuentes de agua potable de la ciudad con el fin de ponerlas en funcionamiento. Así, se realizará un diagnóstico de los puntos de refrigeración que hay repartidos por la ciudad para proceder, acto seguido, a arreglo y activación.
Este despliegue se produce en respuesta a las numerosas demandas de colectivos vecinales y sociales que se vienen recibiendo en el Ayuntamiento por el mal estado que presentan las fuentes que estuvieron quince meses precintadas como medida preventiva por la pandemia. Se ubican en la vía pública, pero principalmente en parques y plazas.
Los trabajos incluyen limpieza e higienización de pulsadores, grifos y caños con el objetivo de que estén en perfectas condiciones para su uso, según ha explicado a este medio Caro-Accino.
El Consistorio realizará un esfuerzo importante en esta materia y confía en que, una vez se realice el mantenimiento para garantizar su correcto funcionamiento, los ciudadanos respeten los puntos de refrigeración, ya que muchos de ellos están inhabilitados debido a actos vandálicos.