El joven que fue detenido el pasado lunes por el asalto a un supermercado de la calle Julio Burell ha sido puesto en libertad con cargos tras prestar declaración ante el juez. Se le acusa de un presunto robo con violencia e intimidación. Durante su huida dos personas resultaron heridas, el vigilante de seguridad del establecimiento y una mujer que se golpeó la cabeza tras recibir un fuerte empujón.
Según ha podido saber este periódico, el arrestado, vecino del municipio de Jódar, fue puesto a disposición judicial este martes por la tarde después de concluir las diligencias en la Comisaría de Linares, donde la Policía le atribuye un segundo robo con violencia a una mujer, a la que sustrajo el bolso por el procedimiento del tirón, el pasado fin de semana, en la calle Pedro Poveda. La víctima sufrió heridas leves en una rodilla.
Los hechos en la tienda de Lidl de la calle Julio Burell ocurrieron sobre las doce y media de la mañana, cuando el ladrón fue descubierto apropiándose de diferentes productos. En ese instante, el agente de seguridad privada se abalanzó sobre él con tan mala fortuna de dañarse un tobillo, por lo que tuvo que ser atendido en un centro hospitalario.
En su precipitada salida del centro comercial se chocó con una mujer mayor, quien perdió el equilibrio y se golpeó la cabeza contra el suelo. Tras el ladrón, también salió el camarero de una cafetería cercana con dirección a la zona de la plaza de toros, donde, finalmente, fue arrestado por la Policía Nacional. El joven cuenta con numerosos antecedentes.
