Algunos niños no pueden cruzar las piernas o son incapaces de ponerse una chaqueta porque sufren alguna dificultad en el proceso sensorial. Tampoco pueden caminar sin la ayuda de una silla de ruedas o un bastón, porque sufren movilidad reducida o son invidentes.
Ponerse en la piel de las personas con discapacidad y experimentar con gran realismo la discriminación y los prejuicios a los que tienen que hacer frente fue uno de los objetivos de la iniciativa llevada a cabo por los alumnos de quinto de Primaria del colegio Europa, ideada por su maestra Ana García Pérez.
Esta particular experiencia, titulada ‘Abre tus sentidos a la inclusión», se celebró en el Paseo de Linarejos y contó con la colaboración del Ayuntamiento de Linares dentro del Plan Local de la Infancia y Adolescencia, puso en más de un aprieto a los escolares que vivieron en primera persona y de manera muy realista lo que llegan a sufrir los niños de su edad que tienen algún tipo de discapacidad.
Eso sí, lo hicieron mediante juegos y charlas, como la que impartió el atleta paralímpico, José Antonio González, ‘Aouita’. Los chavales tuvieron la oportunidad de escuchar su experiencia para conocer la realidad del deporte adaptado.
Los alumnos realizaron, del mismo modo, un circuito con estaciones en las que se plantean ejercicios sencillos, pero con dificultades añadidas para que apreciaran y valoraran las problemáticas a las que se enfrentan las personas con discapacidad en su día a día.
Esta propuesta de Ana García Pérez se enmarcado dentro de un proyecto que se desarrolló durante el pasado curso llamado: ‘Un mundo sublunar llamado Empedoclia’. La docente se muestra muy satisfecha de los resultados y, sobre todo, de la implicación de sus alumnos en la iniciativa desarrollada en el Paseo de Linarejos. «Fue una prueba bastante impactante para todos, porque no somos conscientes de lo que sufren las personas que tienen algún tipo de discapacidad», apunta la tutora a este periódico.
