La mayoría de las historias sobre soledad en personas mayores empiezan en un piso vacío, pero lleno de recuerdos. María tiene 68 años, vive en el barrio de La Paz y enviudó hace un lustro. El silencio abrumador, el peso de la ausencia y sentirse rodeada, pero no acompañada, han provocado en ella un aislamiento no deseado. Ella no es la única que padece este sentimiento. En España tres millones de personas de más de 65 años en su misma situación.
El pasado mes de septiembre, Almudena García de la Fuente, CEO de Fontaine Finesse, recibió la llamada de la concejal de Bienestar Social, Mamen Muñoz, para profundizar en el proyecto en el que su empresa estaba trabajando al objeto de hacer de Linares una «ciudad amigable con los mayores». La edil llevaba tiempo dándole a la cabeza en busca de soluciones a un fenómeno que afecta cada vez a más personas en el municipio. Mamen Muñoz encontró el cielo abierto con la propuesta de la joven linarense. Era lo que estaba buscando desde que se puso al frente del área.
Ambas encajaron rápidamente y se pusieron a trabajar en una estrategia común que no solo abarcaba el problema de la soledad no deseada, sino que buscaba, además, «la conexión entre generaciones y el reconocimiento del valioso aporte de las personas mayores a nuestra ciudad», señala a este periódico Almudena.
El resultado fue la campaña ‘Ni Un Mayor Solo’ que ha constado de distintas iniciativas. La más potente por el impacto visual y el mensaje ha sido una serie vídeos compuesta por cuatro capítulos y un epílogo. «Cada uno de ellos ha explorado diferentes aspectos de la soledad no deseada, las experiencias de vida de nuestros mayores y la importancia de la conexión intergeneracional», explica la CEO de Fontaine Finesse. Para ello, se tomaron como referencia los testimonios de los participantes con la idea de «visibilizar las emociones, los recuerdos, los deseos y las vivencias que definen a nuestra comunidad de mayores, no desde la pena o la lástima, sino desde el reconocimiento de su valor y dignidad». precisa Almudena.
También se crearon perfiles en Instagram, Facebook, TikTok y YouTube, bajo el nombre @NiunMayorSolo, para compartir contenido y generar un espacio de reflexión, interacción y participación entre generaciones. «Este enfoque digital -señala Almudena- fue esencial para dar voz a todos los miembros de nuestra comunidad, permitiendo que las personas compartieran sus experiencias y pensamientos, creando una conexión intergeneracional única. Nos propusimos que el mensaje no se limitara a un solo grupo de edad, sino que atravesara barreras generacionales, promoviendo un cambio en la forma en que nos relacionamos con nuestros mayores», añade.
El impacto de la campaña en redes sociales ha sido notable. Desde su lanzamiento, han alcanzado más de 60.000 visualizaciones, superando todas las expectativas. El dato, a juicio de Almudena, «refleja no solo el interés por la temática de la soledad no deseada, sino también el poder de las redes sociales para conectar a los linarenses de todas las edades».
La iniciativa fue acompañada de un cartel y de una serie de material promocional, como una chapa, con una importante carga de profundidad, puesto que se ha convertido en todo un símbolo. «A través de ella los participantes sellaban un pacto en primera persona contribuyendo a combatir la soledad no deseada en personas mayores linarenses», relata.
Almudena, al igual que la concejal de Bienestar Social, se siente satisfecha y agradecida por el impacto que ha tenido la campaña, desde el punto de vista emocional y humano. «Los vídeos no solo sirvieron para sensibilizar, sino que también nos permitieron conocer más profundamente a los mayores de Linares, dándoles un espacio para compartir sus experiencias y emociones de manera auténtica», enfatiza.
«En todo momento -insiste la joven-, nuestra intención fue dignificar a los mayores, mostrando sus historias sin tratar de abordar el tema de la soledad desde un lugar de pena, sino como una oportunidad para valorar lo que han aportado a nuestra historia. Esta campaña ha sido un punto de partida para seguir trabajando por un Linares más inclusivo, más cercano y más humano, donde cada persona, sin importar su edad, se sienta vista, escuchada y querida», concluye.
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