Los trabajadores y trabajadoras jiennenses se han echado a la calle este primero de mayo para celebrar los logros conseguidos como la subida de las pensiones y del Salario Mínimo Interprofesional o la mejora de la estabilidad en el empleo gracias a la reforma laboral, pero ante la amenaza de un aumento de la conflictividad si las empresas no repercuten el aumento de sus márgenes de beneficios en los sueldos.
Unas 700 personas, según datos de la Subdelegación del Gobierno, han participado en la manifestación convocada por los sindicatos en Jaén capital con motivo del Día Internacional de los Trabajadores. Las secretarias generales de UGT y CC OO, Carmen Castilla y Nuria López, respectivamente, han marchado en el centro de una pancarta que reclamaba «subir salarios» como herramienta para lucha contra la inflación que azota a los trabajadores andaluces.
La marcha, que ha comenzado en la plaza de la Constitución y ha finalizado en el paseo de las Bicicletas, en un recorrido de algo más de una hora, ha contado con la asistencia de destacados líderes de la izquierda en un ambiente electoral ante la inminente cita con las urnas el próximo 28 de mayo.
«Este 1 de mayo aprovechamos para dar un aviso a la patronal: O suben los salarios o habrá conflictividad laboral», ha destacado la dirigente andaluza de UGT en declaraciones a los medios. Castilla ha señalado a continuación que mientras la inflación en Andalucía «muy probablemente» se sitúe por encima del 4%, los salarios están subiendo, como promedio en los convenios, en torno a un 2,7%». Por este motivo, el lema escogido para este Primero de Mayo «no es baladí».
Por su parte, Nuria López ha insistido en la necesidad de que «se repartan los beneficios y suban los salarios: que dejen ya a un lado la avaricia empresarial», ha subrayado. «Pedimos al Gobierno que no den fondos europeos a las empresas que son insolidarias y sí a las que son corresponsables».
Según los sindicatos, en Jaén se han movilizado 3.000 personas, mismo número que en Almería y Cádiz. Unas 2.500 personas se habrían manifestado en Córdoba; 800 en Huelva, 6.000 en Granada y 10.000 tanto en Sevilla como Málaga.