Sin carga política ni asuntos municipales de relevancia para el ciudadano, el último pleno ordinario del año de la Corporación de Linares se ha centrado en la conmemoración Día Internacional del Migrante.
La ciudad se ha convertido de un tiempo a esta parte en punto de recepción de residentes llegada de distintos puntos del planeta. La población de extranjeros ha crecido de forma considerable en los últimos años hasta tal punto aumentar el padrón de vecinos. En su mayoría proceden de Iberoamérica y de Marruecos. Este jueves han llenado de vida el salón de plenos de la Estación de Madrid y han mostrado a la clase política local que no están aquí por capricho, sino para labrarse un futuro mejor.
El Día Internacional del Migrante se conmemora para visibilizar a los millones de personas en todo el mundo que viven fuera de su lugar de origen. Este jueves se han escuchado sus voces, sus historias, la burocracia que soportan para legalizar su situación y el contexto de rechazo que encuentra de determinadas formaciones de conservadoras.
Jessica Beatriz ha defendido la diversidad cultural y la riqueza social y económica que aporta el migrante, que, además, conecta a Linares con el mundo, fomentando la solidaridad y la empatía.




Joana Bermúdez llegó de Colombia y su testimonio no difiere mucho de otros muchos que se han escuchado en la Estación de Madrid. Su historia es de agradecimiento a los linarenses y a su ciudad de acogida, a la que devuelve la hospitalidad aportando su granito de arena en el progreso de la comunidad.
Tras escuchar sus palabras, migrantes de distintos lugares han escenificado lo complicado que es salir de sus países con las maletas que pesan más que el equipaje, donde cada uno de ellos lleva guardados los recuerdos, los miedos y también los sueños.
Han relatado el proceso de llegar a un lugar desconocido de la manos de sus hijos sin saber qué les deparará el destino. Encuentra todo tipo de obstáculos, desde el idioma hasta la incomprensión. Por suerte, no es el caso de Linares, una ciudad que se caracteriza por dar cobijo a personas de diferente procedencia, lo demostró en su época minera e industrial.
La sesión ha finalizado con la intervención de Antonio Castro Segura, voluntario y miembro fundador de Mundo Acoge, y la interpretación de villancicos y canciones populares navideñas. Posteriormente, una vez concluido el pleno, se ha celebrado una jornada de convivencia en el Centro de Interpretación de la Minería.