El Ayuntamiento de Linares, a través de un bando del alcalde, Raúl Caro-Accino, ha decidido ampliar los horarios de cierre de la hostelería durante la Semana Santa. Los días fuertes, del 14 al 17 de abril, coincidiendo con la madrugada del Viernes Santo y Domingo de Resurrección los locales de hostelería y de ocio nocturno de la ciudad podrán ampliar en el horario, de manera que podrán cerrar dos horas más tarde de lo establecido para cada tipo de negocio.
La medida solo afectará al interior de los establecimientos, por lo que los veladores mantendrán el horario permitido en sus respectivas autorizaciones, sin ampliación de horario, según especifica el decreto publicado en la web municipal. En este sentido, se advierte que desde el Domingo de Ramos al Domingo de Resurrección, ambos inclusive, «la ampliación autorizada no podrá superar en dos horas los horarios generales de cierre de los establecimientos públicos».
La disposición de Alcaldía es similar a la aplicada durante las fiestas navideñas y con ello se pretende favorecer a la hostelería linarense en una fechas tan señaladas, sobre todo después de dos años sin procesiones en la calle como consecuencia de la crisis sanitaria derivada del coronavirus.
La remisión de la pandemia permitirá al sector recuperarse después de unos meses durísimos. «Las perspectivas son buenas» de cara a la Semana Santa «porque el público tiene ganas de volver a divertirse con normalidad», declara a El Nuevo Observador la dueña de una cafetería de la calle Julio Burell.
Con respecto a la clientela, manifiesta que «tiene las cosas claras» conforme a la seguridad frente al virus y el respeto de horarios. «Las personas acatan las normas en la medida de lo posible, pero hay casos en los que hay que recordarlo», indica.