Linares lleva un tiempo subido en la ruleta de la fortuna. Los dos boletos de primera categoría (seis aciertos) de la Bonoloto del miércoles sellados en la administración de loterías número 8, ubicada en el Centro Comercial Alcampo, dejaron en la ciudad casi 400.000 euros, en concreto 393.881 euros. En ese mismo establecimiento, solo dos meses antes, se repartieron 60.000 euros de un quinto premio del sorteo de Navidad.
Pellizco a pellizco, la ciudad ha ingresado desde el pasado marzo más de siete millones de euros provenientes de grandes premios de Lotería y Apuestas del Estado, así como de la ONCE. Precisamente, la cantidad más suculenta llegó a través del Extra de Navidad de la Organización Nacional de Ciegos Españoles con cuatro millones de euros. Pero ahí no queda la cosa, porque Luis de Castro vendió 10 cupones premiados con 35.000 euros cada uno del sorteo del 21 de noviembre.
Otro día que llenó de felicidad a Linares fue el sábado 30 de septiembre, cuando la administración número 6, situada en la calle Viriato, despachó 30 décimos del primer premio del sorteo de la Lotería del Sábado. En total, Manuela Marín Valcárcel repartió 1,8 millones de euros entre sus paisanos.
Más recientemente, el pasado 19 de enero, La Primitiva dejó 55.445 euros de un acertante de segunda categoría. El boleto se vendió en la administración número 2 de la Corredera de San Marcos, que el 14 de enero de 2021 repartió 1,5 millones de euros de cinco series del primer premio de la Lotería del Jueves.
La diosa fortuna comenzó esta racha tan seguida, el 5 de marzo con un segundo premio (5 aciertos + complementario) de la Bonoloto, dotado con 120.813 euros. Un mes después, el Jueves Santo, tocó el primer premio de la Lotería Nacional en el despacho de Alfonso X el Sabio, 90.000 euros de tres décimos.
En junio, también la Lotería del Jueves sonrío al municipio con un segundo premio, mientras que la vendedora Jennifer Jiménez Viedma repartió 175.000 del cupón diario de la ONCE del martes 29 de agosto.
Coincidencias crueles
Curiosamente, la felicidad por estos premios contrasta con la tristeza que se vivió en dos jornadas con trágicos sucesos en la localidad. Y los dos por los mismos motivos: incendio e inhalación de humo.
Así, el mismo domingo que el vendedor de la ONCE Juan Lorenzo Rojas celebraba los cuatro millones de euros que había dejado el Extra de Navidad, una pareja y una adolescente de 16 años perdían la vida tras inhalar monóxido de carbono de la combustión de un brasero en una vivienda de la calle Las Descalzas.
El pasado miércoles mientras corría la alegría por los casi 400.000 euros de la Bonoloto, el fuego calcinaba un piso de la calle Vicente Espinel, en el barrio de Arrayanes. Una niña de solo 10 años fallecía poco después al no poder superar las graves consecuencias que le había provocado en el organismo el haber permanecido expuesta a la inhalación de humo.