Linares puede presumir de muchas cosas, pero una de sus tradiciones más valoradas por el visitante son sus tapas, incluidas en el precio de una bebida, por ejemplo una caña de cerveza. Un clásico que ha evolucionado con el trascurrir del tiempo hasta perfeccionar la gastronomía de sus bares.
Así, ha pasado del ‘bollo’ a la sofisticación de sus pequeños bocados para acompañar el aperitivo. Hoy en día, las cocinas de los establecimientos hosteleros de la ciudad ofrecen auténticos manjares a la clientela. Se puede comprobar del 25 de noviembre al 8 de diciembre en la Ruta de la Tapa 2022, donde participan 19 negocios con sus mejores propuestas.
Como en año anteriores, la organización, que componen la Cámara de Comercio, la Asociación de Comerciantes e Industriales (ACIL) y el Ayuntamiento, habrá un concurso para elegir la mejor tapa. Esta saldrá de la valoración del jurado y del público a través del rutero, que deberá validar en cada bar.
Linares ha conformado gracias a esta iniciativa una sólida tendencia gastronómica que cuenta con la aprobación de todo aquel que degusta estos platos imprescindibles. En sus fogones se combina la tradición con la modernidad de la alta cocina.
Una de las novedades de esta edición es la presencia del Executive Pastry Chef de Linares, Rafael Charquero, así como nuevos establecimientos que se han sumado a la ruta, que fue presentada el pasado viernes en Gourmet Cazorla.