Los precios de los bienes y servicios van subiendo. Y dentro de ese paquete también van incluidos los actos y rituales del final de la vida. La Estación de Madrid acoge este lunes un pleno extraordinario para abordar una nueva revisión de las tarifas del cementerio, que contempla la subida del 1,5% de los gatos funerarios conforme al Índice de Precios de Consumo (IPC) del año anterior. Con ello, se cumple, además, con la obligación legal recogida en los pliegos que rige la concesión.
La propuesta de la Concejalía de Salud y Consumo responde a «la necesidad de mantener un nivel de servicio digno y
sostenible, acorde con los estándares que merecen los ciudadanos». Asimismo, esta revisión tiene como objetivo «hacer frente al incremento sostenido de los costos operativos sin comprometer la atención, el cuidado de las instalaciones y los servicios que se ofrecen», según sostiene el departamento que dirige Antonio Luis Hervás en la iniciativa que se debatirá en la sesión, prevista para las ocho y media de la mañana.
Según el documento, al que ha tenido acceso este periódico, este incremento permite también en cierto modo equilibrar la balanza contable de la empresa Cementerio Parque Linares, que gestiona los servicios de forma indirecta. De hecho, el informe económico presentado por la concesionaria para argumentar la revisión de precios arroja un resultado negativo de 10.387,73 euros.
Con las nuevas tarifas, la inhumación en nicho costará en adelante 83,2 euros, mientras que en tumba es algo más cara (panteones y mausoleos): 335,95 euros. Por su parte, si lo que se quiere es un nicho temporal (de 5 a 75 años), dependiendo de las filas, como mínimo deberá abonar una cuota anual de 28 euros con esta revisión.
Conviene recordar que el Ayuntamiento cubre los gastos funerarios a aquellas familias que se encuentran en una situación económica compleja mediante los enterramientos de beneficencia.
Por otro lado, la Administración local y Cementerio Parque Jardín han realizado diversas actuaciones en los camposantos municipales. Así, se ha reparado del muro del patio de San Diego del cementerio de San José, mientras se trabaja en el proyecto de rehabilitación de la capilla, la renovación del riego para un uso más eficiente del agua o la reconstrucción de las nicheras.
El Grupo Municipal Socialista no ha tardado en criticar esta subida que plantea el equipo de Gobierno, que se suma al incremento de la factura del agua. «Prometieron cuidar el bolsillo de los linarenses, pero cada día lo aprietan más», denuncian desde el principal partido de la oposición.