El Juzgado de lo Penal número 3 de Jaén ha condenado a un hombre, de 67 años, a pagar 5.320 euros en multas tras haber sido sorprendido cazando pajarillos con artes prohibidas. Además, deberá indemnizar en 9.008 euros a la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía.
Los hechos sentenciados, a los que ha accedido Europa Press, tuvieron lugar el 28 de julio de 2019 cuando el acusado procedió a colocar en el paraje Las Mendozas, en Baños de la Encina, 14 costillas de alambre, que es un medio de captura no selectivo y que se encuentra prohibido.
Mediante este sistema llegó a capturar y a dar muerte a 19 ejemplares, entre los que se encontraban 12 currucas capirotadas, cuatro petirrojos, un colirrojo tizón y una curruca cabecinegra, todas ellas incluidas en el Listado de Especies Silvestres en régimen de protección especial, por lo que está prohibida su caza. Además, entre los ejemplares capturados, se encontraba un zorzal común.
Fue un guarda rural el que sorprendió a este hombre cazando y el que acabó retirándole las capturas para seguidamente llevarlas ante la Guardia Civil e iniciar las diligencias judiciales de investigación que han culminado con la celebración de la vista.
Las capturas las llevaba ocultas en una riñonera, motivo por el que la magistrada considera que el acusado «era perfectamente conocedor de que su conducta era constitutiva de un delito».
En concreto, se le condena, tal y como había solicitado desde un primer momento el Ministerio Fiscal, por un delito contra la fauna en su modalidad de caza de especies protegidas y por otro delito contra la fauna en su modalidad de uso de medios destructivos y no selectivos.
Asimismo, se le inhabilita durante tres años y medio para profesión u oficio relacionado con animales y para el derecho de cazar y pescar. La sentencia le condena también al pago de las costas procesales. La sentencia no es firme y cabe recurso de apelación ante la Audiencia de Jaén.