El Ayuntamiento de Linares sigue inmerso en su particular parálisis política y bloqueo de la gestión municipal. Al lío judicial de la moción de censura y la presunta prevaricación de quince concejales, amen de otras causas, se suma la suspensión de la comisión de Economía y Hacienda solicitada por la oposición para este jueves 23 de junio.
En ella se debían debatir las enmiendas a los presupuestos municipales de 2022 de los distintos grupos municipales antes de que el documento fuera elevado de nuevo al pleno. Sin embargo, a primeras horas de la mañana, el alcalde, Raúl Caro-Accino, ha desconvocado de manera unilateral la reunión ante el asombro de los ediles que tenían confirmada su asistencia.
Esta decisión supone el enésimo frenazo del borrador de cuentas que continúa su particular peregrinaje sin destino desde que fuera presentado por la anterior concejal de Hacienda, Noelia Justicia, a finales del pasado mes de enero. Caro-Accino, en esta ocasión, ha obviado por completo la convocatoria del secretario del Ayuntamiento a instancias de PSOE, Izquierda Unida y Cilu.
En este punto, la Ley de Bases del Régimen Local deja claro que las comisiones no podrán demorarse por más de quince días hábiles desde que fuera solicitada y solo tiene potestad para desconvocarla el propio secretario municipal.
Poco antes de las ocho de la mañana, los corporativos recibían un mensaje de una funcionaria en el que se les informaba de que «por orden del señor alcalde, presidente de la comisión de Economía y Hacienda, se desconvoca la comisión prevista para el día de hoy a las nueve de la mañana», decía la comunicación a la que ha tenido acceso este periódico.
Finalmente, la comisión de Economía y Hacienda se ha celebrado tras constatar el alcalde que no podía suspenderla. Ha sido sin su presencia ni la de la teniente de alcalde, Ángeles Isac. Ha estado presidida por el tercer teniente de alcalde, Enrique Mendoza, y apenas a durado ni cinco minutos, en los que no se ha llegado a ningún tipo de acuerdo. El PSOE no ha asistido.
