Reinventar el concepto de la tienda de souvenirs no es tarea fácil. La mayoría de la gente asocia estos comercios a una serie de artículos –imanes, llaveros, camisetas y un largo etcétera– que se repiten una y otra vez y que tratan de recoger la identidad más folclórica de un lugar. Sin embargo, en la renovada tienda de la Mari Trini Cañizares, ubicada en El Lugarillo, han querido apostar por una idea diferente: que los recuerdos que se lleven a casa contengan un poco del alma de la ciudad.
Nada más cruzar la puerta del establecimiento uno percibe que está en un lugar extraordinario. La ropa de talla especiales, con la que comenzó el negocio hace siete años, ha quedado en un segundo plano. Lo primero que uno se encuentra es una bandera de Linares y al inclinar la mirada, vitrinas repletas de artículos que recuerdan la historia y tradiciones del municipio.

La mayoría de los productos son artesanales y disponen de los permisos pertinentes para su venta. Mari Trini Cañizares y su marido decidieron adquirir la maquinaria necesaria para crear ellos mismos los estampados de las camisetas, de las bolsas de viaje, de las tazas y de cualquier otra cosa que se imagine.
Lo que más llama la atención son las réplicas de los bancos del Paseo de Linarejos o los Land Rover Santana en miniatura. «Es lo que más se lleva la gente, sobre todo los linarenses que viven fuera», asegura a este periódico la dueña del establecimiento.
Aunque nacida en Jaén, su vida ha estado ligada a la ciudad minera, por familia y por amor. Mari Trini es todo amabilidad, escucha y respeta al cliente. Sabe cómo tratarlo y cómo sorprenderlo. «Es un encanto de mujer», subraya Lola, vecina de la calle Pintor Zuloaga.




Declaración de intenciones
El espacio en sí ya es toda una declaración de intenciones, pues intenta reunir algunos de los iconos más característicos de Linares, desde la figura del minero a pegatinas con la leyenda ‘Soy der gachi’, pasando por recuerdos relacionados con Cástulo y hasta la mascota ‘Linagachi’, creada por Antonio Momblant García. Además de todos estos souvenirs tan linarenses, encontramos otros más contemporáneos, para aquellos visitantes más exigentes.
No en vano, el comercio (calle Arcipreste Torres Quirós, 3) muestra la potente iconografía de Linares, de sus fiestas y tradiciones, eludiendo los tópicos. Son objetos en los que se han dedicado muchas horas no solo en su elaboración, sino también en el diseño. Es, en cierta manera, exposición visual de lo que representa el sentimiento linarense.
Es casi imposible visitar la tienda y no caer en la tentación de dedicar parte del presupuesto a un souvenir. «Son todos muy bonitos», asiente otra clienta. Esta es una tienda que merece una visita aunque no se vaya a comprar. Solo por curiosear, puesto que los artículos están hechos con el corazón y el alma de una emprendedora.


Puede consultar el catálogo de artículos de Marí Trini Cañizares en su página de Facebook: https://www.facebook.com/maritrini.canizares
Fotos: Javier Esturillo
Todo está espectacular todo lo que hacen y tienen unas manos Mari Trini y su marido José Antonio ..Todos deberían de ver la tienda en el lugarillo..