El consumo defraudado en toda Andalucía, de enero a mayo de 2023, ha superado los 94,5 millones de kilovatios a la hora. Sevilla, con 33 millones, es la provincia de la región por fraude en el suministro eléctrico. Le siguen Málaga (16.653.580) y Granada (14.138.403). Almería es la cuarta provincia, con un total de 7.909.913 kilovatios hora defraudados; seguida de Jaén, con 6.646.649; Cádiz (6.405.779); Córdoba (6.019.724) y Huelva, con 3.159.583.
En Almería, lo defraudado vinculado al cultivo de marihuana suma 3.528.909 kilovatios a la hora, un 44% del total. En el caso de Cádiz, han sido 2.253.115 kilovatios a la hora defraudados para plantar marihuana (35% del total); Córdoba, 721.363 kilovatios hora (11,9%); Granada, 5.687.445 (40%); Huelva, 421.671 (13,3%); Jaén, 1.281.068 (19,2%); Málaga, 3.813.387 (22,8%) y Sevilla, con 1.698.645 (5,05%).
Esta demanda de energía ocasiones situaciones de «gran riesgo eléctrico» al sobrecargar la red. Para evitar que esa sobrecarga provoque incendios, esta infraestructura eléctrica dispone de protecciones, como los fusibles, que absorben la sobretensión y evitan males mayores. En las zonas donde se producen fraudes se registran picos altos de fusibles fundidos al día por centro de transformación.
Cada vez que se funde un fusible hay que reponerlo para poder tener continuidad en el suministro, pero para realizar su cambio hay que esperar a que el centro de transformación baje de temperatura, para que los técnicos puedan manipular la red. Esto supone que el cambio de un fusible desde que Endesa tiene conocimiento hasta que se ejecuta pueda suponer una media de dos horas, explica la empresa.