Endesa, a través de su filial de redes e-distribución, ha llevado a cabo un refuerzo de sus infraestructuras eléctricas en la barriada de Arrayanes de Linares donde «se está registrando una proliferación de sobrecarga en la red eléctrica no justificada» que está haciendo que «las protecciones de las instalaciones salten para prevenir incidentes».
Según informa la compañía eléctrica, la sobrecarga en la red que se registra en esta zona empezó a detectarse a principios de año a raíz del incendio de una línea de baja tensión subterránea que quedó calcinada. A pesar de que la línea en cuestión solo contaba con un cliente con contrato en vigor, el incendió llevó a los técnicos de Endesa a realizar una reforma completa del cableado tendiendo 180 metros de nueva instalación dotada de la última tecnología.
La nueva infraestructura entró en funcionamiento en el mes de febrero reduciéndose de forma inmediata el número de incidencias. Además, en el mes de mayo Endesa, junto con Policía Nacional, llevó a cabo una inspección masiva de fraude detectándose 46 suministros con enganche directo.
Estas medidas supusieron una reducción de las incidencias, pero las altas temperaturas registradas estos días están poniendo sobre la mesa de nuevo la misma problemática de saturación de las líneas eléctricas en esta zona.
Por este motivo los técnicos de la compañía han instalado un innovador sistema de telecontrol de las redes denominado Low Voltaje Supervisor (LVS), que permite actuar de forma preventiva, llegando a detectar comportamientos anómalos en las instalaciones, como los causados por los enganches ilegales.
Todas estas medidas han supuesto una inversión de 40.000 euros y Endesa apunta que «se está monitorizando continuamente la red de distribución con el fin de garantizar un suministro de calidad a los clientes con contrato en vigor».